Cojeras

Una cojera es una alteración de la marcha en la que una o varias extremidades no se mueven o no se apoyan de forma correcta. En las cojeras podemos encontrar una alteración del apoyo, generalmente por dolor o una alteración de la fase de elevación de la extremidad, ya sea por dolor, debilidad o falta de rango de movimiento.
En el tratamiento de las cojeras no sólo debemos tratar la región afecta, si no que es fundamental trabajar las posibles compensaciones que se hayan generado.

Existen grados de cojera en función de su gravedad:

  • Grado 0: no cojea.
  • Grado 1: su cojera no se detecta al paso pero sí al trote bajo determinadas circunstancias, como por ejemplo en un círculo.
  • Grado 2: no se detecta su cojera al paso pero sí levemente al trote bajo cualquier circunstancia.
  • Grado 3: su cojera es ligeramente detectable al paso y marcada al trote.
  • Grado 4: la cojera es muy marcada al paso y al trote.
  • Grado 5: el perro no apoya la extremidad dolorida.

La evaluación de la cojera debe hacerse desde la observación de los movimientos del perro. Buscaremos una superficie lisa y antideslizante para observar los diferentes aires del perro desde todos los ángulos ya que en ocasiones nos encontramos con cojeras muy sutiles sólo evidenciables a través de los movimientos alterados de otros segmentos. Es muy habitual encontrarnos con movimientos de ascenso de la cabeza cuando el perro apoya la extremidad anterior afecta, o con movimientos laterales de la columna en la fase de vuelo de un posterior con el rango articular limitado. En ocasiones nos vemos obligados a estresar más ciertas articulaciones para poder ver la claudicación, para esto podemos usar rampas y escaleras que tienen mayor exigencia física.