A pesar de lo que la gente cree, las garrapatas ni vuelan ni saltan, la mayoría trepan hasta la punta de los pastos y esperan para agarrarse de la piel de un animal. Cuando detectan un huésped pasajero, simplemente se suben a él. Tan solo proyectar una sombra sobre algunas garrapatas puede revelar su presencia. Las garrapatas también pueden detectar a los animales por su aliento, olor, calor, humedad o vibraciones causadas por su movimiento.
Por eso, durante los paseos por el campo con nuestros perros es cuando más expuestos pueden estar, sobretodo entre Abril y Septiembre, ya que suelen proliferar después de periodos de humedad cálidos. A las garrapatas no les gusta el ambiente muy seco ni las bajas temperaturas.
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¿Cómo es una garrapata?
Los ixódidos, más conocidos como garrapatas son artrópodos medianos de 3-8 mm, aunque las hembras alimentadas pueden llegar a medir hasta 1 cm. Biológicamente están más cerca de las arañas y de los escorpiones (son arácnidos con 4 pares de patas), y pertenecen al orden Acarina. Físicamente tienen el cefalotórax y el abdomen fusionados, carecen de antenas, poseen un par de palpos libres y un aparato bucal, denominado hipostoma, adaptado a la sujeción y la succión.
¿Qué enfermedades transmiten las garrapatas?
Las garrapatas transmiten enfermedades a través de varios patógenos como Ehrlichia, Babesia, Rickettsia, Hepatozoon, Borrelia, Anaplasma o Mycoplasma. Entre las principales enfermedades transmitidas por las garrapatas a los perros encontramos:
- Enfermedad de Lyme o Borreliosis (rigidez, dolor muscular y/o articular, fiebre, pérdida de apetito, entre otros)
- Babesiosis: un protozoo que parasita los glóbulos rojos de la sangre (fatiga, fiebre, anorexia y orina de color rojizo, entre otros).
- Ehrlichiosis Canina: producida por la bacteria Ehrlichia Canis transmitida por la garrapata (fiebre intermitente, pérdida de peso, hemorragias nasales, letargia, entre otros.)
- Las más frecuentes en nuestro país son las dos últimas.
¿Qué hacer si le encontramos garrapatas a nuestro perro?
Hay que quitar la garrapata entre las 24 y 48 horas en las que se ha adherido, ya que los microorganismos patógenos que llevan en su cuerpo y en su saliva necesitan por lo menos dos días para infectar al perro.
- Para empezar, pasa un peine para pulgas por todo el pelo de tu perro por si hubiese garrapatas sueltas que aún no se han agarrado a la piel. Con él podrás arrastrarlas y eliminarlas antes de que se le enganchen.
- Para buscarlas, inspecciona las zonas donde tu perro se rasca y ve pasando la mano a contrapelo para detectarlas. Las garrapatas buscan engancharse en zonas de piel fina y escondida, como las axilas, alrededor de los ojos, las orejas, entre los dedos,…..
- Una vez encontrada, mira hacia donde se ha enganchado la garrapata, ya que deberás tirar en ese mismo ángulo para sacarla.
- Impregna generosamente un algodón en alcohol o acetona y cubre a la garrapata con él durante 5 minutos, esto hace la garrapata se encoja y saque las patas de la piel, que son las causantes de la infección.
- Agarra la garrapata con las pinzas colocándolas lo más cerca posible de la piel para que no se quede la cabeza dentro. Puedes usar unas pinzas normales, pero en el mercado puedes encontrar pinzas especificas para esto que facilitan la extracción.
- Tira suavemente hacia atrás en el mismo ángulo en que está enganchada pero de manera firme. Evita tirar de golpe.
- Una vez fuera, es importante matar a la garrapata y para ello debes meterla en alcohol o quemarla.
Una vez extraída, cura la pequeña herida que ha dejado en tu perro con una gasa y un poco de betadine. No tapes la herida, es mejor que esté al aire. Evita el lamido de tu perro en la zona de la picadura.
Recuerda revisar a tu perro después de cada paseo y no olvides revisar también tu calzado y tu ropa ya que las garrapatas también de enganchan a las personas con el mismo riesgo de transmisión de enfermedades que en nuestros perros.